El jefe de la delegación del Gobierno responsabilizó a las Farc del lento avance de las conversaciones por su insistencia, desde el comienzo del proceso, en
La Habana, 12 oct (SIG). El jefe de la delegación del Gobierno en la Mesa de Conversaciones con las Farc, Humberto de la Calle, hizo hoy desde La Habana una serie de reflexiones sobre la marcha del proceso, en las que advierte que los diálogos no han sido expeditos y no han tenido la efectividad que se esperaba por la insistencia de las Farc de introducir en las conversaciones temas que no están en el acuerdo pactado.
Para De la Calle el origen del problema no está en el método de trabajo.
«Desde el discurso del jefe de la delegación de las Farc en Oslo en octubre de 2012 hasta hoy, han insistido en temas como el modelo económico, la reforma estructural del Estado, la minería o las Fuerzas Armadas, para solo citar unos pocos de los muchos que han propuesto, temas específicos que no forman parte de la Agenda pactada», señaló.
El jefe de la delegación insistió en que el objetivo de las conversaciones con las Farc es llegar a un acuerdo que le ponga fin al conflicto, y que en ningún momento el Gobierno está validando lo que hace o dice la guerrilla.
En ese sentido, recalcó que la delegación del Gobierno nunca ha perdido de vista quiénes están sentados en estos diálogos, que son «de un lado un Gobierno democrático en representación de un Estado y una sociedad democrática y, de otro, una guerrilla de la que se espera que abandone las armas y la violencia para defender sus ideas desde la democracia, en un marco de garantías suficientes», por lo que pidió a las Farc demostrar con hechos, no con palabras, que mantienen su voluntad de llegar a un acuerdo que ponga fin al conflicto.
«Esperamos que las Farc estén a la altura del momento histórico… Los colombianos quieren avances, esperan compromisos, exigen acuerdos, no conciben conversaciones interminables», aseguró De la Calle.
Por último, el vocero de la delegación oficial dijo que el Gobierno insiste una vez más en su voluntad de avanzar en la discusión y búsqueda de acuerdos sobre los temas de la Agenda pactada, que casan perfectamente con la postura moderna y progresista del Presidente Santos, y recordó al país que de llegarse a ese acuerdo integral sobre los seis puntos de la Agenda, «serán los colombianos los que tendrán la última palabra para decidir si los aceptan o no».
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