El proceso de intervención de Electricaribe ha sido uno de los más complejos en el país el cual ha demandado un trabajo articulad
El proceso de intervención de Electricaribe ha sido uno de los más complejos en el país el cual ha demandado un trabajo articulado entre el Gobierno y la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios. El balance de los primeros seis meses de gestión de la intervención de la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios en Electricaribe demuestra que este proceso ha sido positivo, al mantener la continuidad en la prestación del servicio de energía eléctrica a los más de 2 millones 641 mil suscriptores en la Región Caribe.
Durante este periodo se ha cumplido con las obligaciones como el pago corriente de energía a los generadores, proveedores de bienes y servicios, contratistas, nómina de los trabajadores y pensionados. Se demuestra que la intervención ha logrado incrementar el recaudo (a corte de mayo fue del 88.3), se hicieron algunas inversiones para mejorar la calidad del servicio, se optimizaron los tiempos de respuesta de atención al cliente, al pasarse de 38 minutos a 28 minutos por persona y en atención de daños se disminuyó en un 35%, reflejando una compañía más cercana a sus clientes.
Lo más importante es que gracias a la intervención se ha evitado que la empresa pierda valor y se mantenga el servicio de energía eléctrica hasta que se encuentre un nuevo operador con músculo financiero para que realice las inversiones necesarias que mejoren la calidad del servicio de energía eléctrica en la Costa Caribe.
Los primeros pasos del proceso de intervención, consistieron en estabilizar financiera y técnicamente la compañía y así garantizar la prestación del servicio a los clientes en todos los rincones de la costa. Para el caso de las pérdidas de energía, es decir aquella que es hurtada o se pierde por las malas condiciones de la red de distribución, esta fue incrementando a través de los años. En 2013, 15,70%; 2014, 16,37%; 2015, 16,43% y en 2016 alcanzaron el 17,08%. En cuanto al cobro, es decir los ingresos por la prestación del servicio de energía por parte de los clientes se pasó en 2011 de 92,31% a un 82,94% en 2016.
El tema de las inversiones ha sido históricamente crítico por cuanto se invirtieron $203.847 millones de pesos en 2011 mientras que en 2015 sólo alcanzó los $131.803 millones de pesos. Situación similar se presentó en 2016 con una inversión del orden de los $131.745 millones de pesos, presentando un rezago en las inversiones que se verán reflejadas en la calidad del servicio.
El bajo nivel de inversión provocó que el SAIDI pasara de 82,33 horas de interrupciones en 2012 a 99,37 horas en 2016. Para el caso del SAIFI que mide el número de veces de las interrupciones en 2012 fue de 80,32 a 100,33 veces en 2016.
El inicio de la solución
Desde el primer día de la intervención por parte de la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios se inició el proceso para que los clientes contaran con el servicio de energía en sus casas, establecimientos comerciales e industrias en toda la región Caribe. Paralelamente a la designación del Agente Especial, Javier Lastra Fuscaldo; el Presidente de Electricaribe, Edgardo Sojo González y un equipo interdisciplinario adoptaron acciones para garantizar la normal operación de la compañía.
Uno de los primeros retos fue levantar los procesos de limitación de suministro de energía vigentes y disminuir la exposición en bolsa por medio de la suscripción de contratos bilaterales. Cumplidos una serie de pasos, la exposición pasó del 60,4% en diciembre de 2016 al 38,2% a mayo de 2017.
En este mismo proceso, se ha mantenido un diálogo fluido con los generadores y el administrador del mercado de energía mayorista (XM) buscando disminuir la exposición y generando confianza en una empresa como Electricaribe intervenida y con grandes riesgos financieros. Es así como durante el mes de diciembre con la gestión del Superintendente de Servicios Públicos, el Fondo Empresarial emitió una garantía por valor de $150 mil millones de pesos para respaldar la compra de energía de Electricaribe ante XM.
Es importante resaltar que con la medida de intervención se suspendieron las obligaciones anteriores al 14 de noviembre de 2016 con todos los acreedores, lo cual generó un alivio a la caja de la compañía, y se canalizaron todos los recursos para garantizar la prestación del servicio. Y adicionalmente se implementó un esquema de pagos anticipados a proveedores que eran vitales para la operación y tenían problemas financieros por el monto adeudado antes de la toma.
La apuesta en materia de inversiones para el año 2017 es acometer 264.500 millones de pesos apoyados con socios estratégicos, lo cual permitirá un incremento del 106% de la media de lo ejecutado en 2015 y 2016.
Incremento del cobro
El indicador de cobro en comparación con los seis meses anteriores a la toma de posesión ha mejorado durante los primeros seis meses de la intervención, en un 1,67% equivalentes a un mayor ingreso en la compañía de $32.000 millones. Igualmente, la empresa implementó la campaña de recaudo “La Formulita”, que se desarrollará hasta el próximo 31 de julio con el fin de incentivar el pago oportuno del servicio de energía, y flexibilizar los acuerdos de obligaciones vencidas con los clientes de acuerdo a su capacidad de pago.
En los barrios subnormales también se desarrolla una estrategia de cobro con una socialización previa en los siete departamentos de la Costa, con alcaldes y líderes. Se implementaron los Periodos de Continuidad Concertada (PCC) para fomentar el recaudo y desarrollar de manera simultánea un plan de gestión social en estas comunidades vulnerables.
Convenio Financiera de Desarrollo Nacional
Mientras tanto, además de las medidas administrativas internas para mejorar la gestión y hacer un uso eficiente de gastos, Electricaribe logró la firma de un contrato con la Financiera de Desarrollo Nacional (FDN) para que evalúe y defina las posibles alternativas de estructuración e implementación de la solución definitiva para la continuidad en la prestación del servicio de energía en la Costa Caribe. La FDN apoyará toda la estrategia de protección de los derechos de los usuarios, acreedores y empleados, y recomendará la mejor alternativa que permita dar continuidad a la prestación del servicio de energía, acompañando a la empresa en la implementación de la alternativa estratégica que escoja. Así mismo, la FDN coordinará los procesos de negociación y reestructuración de pasivos de Electricaribe, si hay lugar a ello.
Este logro, ha sido posible por el diálogo sostenido y fluido con los diferentes actores, a quienes desde el primer momento de la intervención se les ha mantenido informados del alcance de las decisiones adoptadas.
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