Los pasos dados por los gobierno de Bogotá y Quito para el pleno restablecimiento de las relaciones bilaterales generan hoy una mayor confianza entre lo
Los pasos dados por los gobierno de Bogotá y Quito para el pleno restablecimiento de las relaciones bilaterales generan hoy una mayor confianza entre los dos países, aunque aún quedan pendientes muchos temas sobre la mesa de las negociaciones.
Al menos así se desprende de las expectativas crecientes en torno a los acercamientos casi continuos que se dan, encaminados a reconfigurar los vínculos entre los dos países vecinos.
Ese será el objetivo primordial del encuentro que sostendrá mañana la canciller colombiana, María Ángela Holguín, con su par ecuatoriano, Ricardo Patiño, en la ciudad fronteriza de Ipiales, en el departamento de Nariño.
En dicha reunión ambos funcionarios tratarán el tema de la incursión armada colombiana a territorio ecuatoriano en 2008 para atacar un campamento clandestino de la guerrilla, hecho que motivó la ruptura de las relaciones y generó una fuerte tensión entre las dos naciones.
Al respecto Holguín sostuvo que ese será uno de los principales asuntos a tratar con Patiño, ante las inquietudes de Ecuador en torno al incidente, que dejó una veintena de muertos, incluido el entonces segundo jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Raúl Reyes.
La funcionaria reconoció que hay una serie de requerimientos que Ecuador quiere conocer sobre la operación misma. «Y eso -apostilló- estamos mirándolo detenidamente».
Quito expresó recientemente su interés por conocer qué tipo de armas fueron utilizadas en el mencionado ataque ilegal contra el grupo insurgente, y cuál fue el papel de Washington en la operación.
Por otra parte, si bien el gobierno colombiano entregó a Ecuador una copia de la información contenida en los presuntos computadores atribuidos a Reyes -recuperados supuestamente tras el fuerte bombardeo- aún las autoridades del vecino país consideran que hay lagunas oscuras por develar.
Cabe destacar que la entrega de esa información era uno de los requisitos exigidos por Quito para el restablecimiento pleno de las relaciones bilaterales.
Por otra parte, la agenda del encuentro incluye, además del tema de seguridad, proyectos de desarrollo y de infraestructura para la frontera común.
«Vamos a revisar unos proyectos de infraestructura que vamos a llevar a cabo», adelantó Holguín la víspera poco antes de exponer ante una comisión de control político del Congreso los pasos dados por el gobierno para un acercamiento con Ecuador y Venezuela.
A su vez, los cancilleres abordarán la crisis humanitaria en la frontera por la elevada cifra de colombianos refugiados en Ecuador como consecuencia de la espiral de violencia que vive el país, en medio de un conflicto interno armado que Bogotá se niega a reconocer.
No obstante, aún cuando hay inquietudes por resolver, ambos gobiernos parecen decididos a dar vuelta a la página de las tensiones, sobre la base del restablecimiento de la confianza y el diálogo franco.
mv/acl
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